Premio Pritzker 2014 para Shigeru Ban

El arquitecto japonés Shigeru Ban (Tokio, 1957) ha sido galardonado con el Premio Pritzker 2014, considerado el Nobel de la disciplina, por sus proyectos «elegantes e innovadores para clientes privados» y también por usar «el mismo diseño inventivo y habilidoso para sus amplios esfuerzos humanitarios».

Shigeru Ban comenzó a trabajar, hace más de 20 años, cuando nadie hablaba de sostenibilidad. Ni siquiera él, cuando se enteró de que tres millones de refugiados vivían en Ruanda a la intemperie se presentó en las oficinas de la ONU en Ginebra para ofrecer un invento: una estructura de tubos que evitaría la deforestación de los bosques ruandeses, la ONU los estaba talando para construir cabañas y lo escuchó. Desde entonces Ban se ha volcado en hacer una arquitectura que conjuga la máxima eficacia con los mínimos materiales.

Su obsesión con reciclar lo existente y con trabajar con lo disponible en cada lugar le llevó a reutilizar cajas de cerveza como cimientos, en las viviendas de emergencia levantadas tras el terremoto de Kobe de 1995.
Terremoto Kobe

Shigeru Ban es un referente de la arquitectura humanitaria, cuenta con varias intervenciones tras terremotos como es el caso de la Iglesia de Papel de Kobe, reconstruida en Taiwán una década después.
Iglesia de Papel de Kobe

En el 2013 concluyó una catedral de cartón en Christchurch, Nueva Zelanda y, con el mismo material.
Christchurch

A pesar de que, en la última década, su reputación le ha ganado grandes encargos, como el Centro Pompidou de Metz, Ban sigue dedicando la mitad de su tiempo a un trabajo que no cobra pero que le exige ingenio e innovación constantes: la emergencia. Esa indagación contagia toda su obra. El Pompidou de Metz, por ejemplo, investiga el espacio intermedio, el que, sin ser dentro ni fuera, hace que quienes acaban de vivir un terremoto se sientan protegidos sin temer que esa protección los aplaste cuando lleguen las réplicas.
Pompidou de Metz

Por eso, la elección de Shigeru Ban como premio Pritzker es, además de justa, responsable. Y optimista: refuerza la idea de que la arquitectura también puede ser un asunto alejado de las modas, dependiente de la investigación y pegado a la necesidad.

Fuente: El País y El Mundo 
Fotos: El País y Wikipedia