Antes Teatro Nacional ahora Palacio de Bellas Artes

El Palacio de Bellas Artes era el edificio que albergaba al antiguo Teatro Nacional, considerado el más importante en su género en la vida artística y cultural de nuestro país durante la segunda mitad del siglo XIX.

Al iniciarse el siglo XX, como parte del programa de obras arquitectónicas con las que se estaba embelleciendo a la Ciudad de México, se pensó primero en renovarlo, pero se optó por demolerlo para construir otro, acorde al crecimiento urbano y cultural de la Ciudad. Se estudio tanto por parte de las autoridades como por el arquitecto Adamo Boari,decidieron en 1901 que se situara a un costado de la Alameda Central.

La historia de su construcción es compleja y tiene una dinámica singular: la definen 2 épocas importantes de nuestro país: el régimen de Porfirio Díaz y la Revolución Mexicana.

Los trabajos se iniciaron en 1904 con el objetivo de terminarlo en cuatro años; sin embargo, problemas presupuestales y técnicos fueron demorando su conclusión. Tras el estallido de la Revolución en 1910 y el agravamiento de la situación económica en el país, Adamo Boari regresa a Europa en 1916. Se había concluido, hasta esa fecha, casi todo el exterior, excepto el recubrimiento de la cúpula.

En el periodo de 1917 a 1929 estuvo en completo abandono, hubo interés tanto del algunos gobiernos como del público, el uso que le daban era para celebrar actos importantes e la vida citadina.

A partir de 1930, bajo la presidencia de Pascual Ortiz Rubio, el arquitecto Federico E. Mariscal fue el encargado del proyecto de la conclusión del Teatro Nacional; sin embargo, no es sino hasta 1932, con el apoyo del secretario de Hacienda, Alberto J.Pani, que la obra fue revitalizada con las instrucciones precisas de concebir un edificio «… asiento de una institución nacional de carácter artístico», que albergara varios museos, de ahí que por primera vez en 30 años se cambiara el nombre del edificio, de Teatro Nacional al de Palacio de Bellas Artes. Debido a la fuerte inversión que se requería para acabar el recinto, éste debía responder a una necesidad social y ser de utilidad pública. Así, el Palacio de Bellas Artes fue concluido por el arquitecto Mariscal el 10 de marzo de 1934.

Del 2008 a 2010 se llevó a cabo la mayor intervención hecha a su teatro y sala de espectáculos, en la que se renovaron plataformas, tramoya, escenario, foso, iluminación, acústica, cabinas y butaquería. Se han realizado otras rehabilitaciones en el recinto, entre las que destacan en 1993, la construcción del estacionamiento subterráneo; un año después la remodelación de las salas de exhibición del Museo del Palacio de Bellas Artes; y de 2000 a 2004, la restauración de sus cúpulas.

Así que, si visitan la Cd. de México no olviden conocerlo 🙂

Fuente: INBA
Fotos: INBA / Wikipedia